El Reino de la Araucanía y Patagonia, fundado en 1860 por Orélie-Antoine de Tounens, es un símbolo único de la defensa de los derechos de los pueblos indígenas, particularmente de los mapuches, frente a la colonización chilena y argentina.
Orélie-Antoine de Tounens, un abogado francés visionario y audaz, se embarcó en una aventura extraordinaria para ofrecer a los mapuche un marco político que les permitiera resistir la opresión. Hombre de convicciones y coraje, dedicó su vida a un ideal de libertad y emancipación, convirtiéndose en una figura emblemática en la lucha por los derechos de los pueblos olvidados.
Tras la abdicación de SAR Federico I, el Consejo de Regencia garantiza la continuidad institucional hasta la designación del noveno soberano, garantizando la estabilidad y la sostenibilidad. Desde el 16 de febrero 2025, la regencia está asegurada por Dame Marianne Paine Stahle, duquesa de Angol.


El Pueblo Mapuche
Un grupo indígena sudamericano, rico en historia, cultura y resiliencia. Los mapuches, ubicados principalmente en el sur de Chile y el oeste de Argentina, son un ejemplo notable de determinación y orgullo cultural.
Geografía: un territorio de diversidad y riqueza
El territorio mapuche abarca una región diversa y hermosa, que incluye las regiones de Araucanía, Los Ríos y Biobío de Chile, así como partes de la Patagonia argentina. Este vasto territorio se caracteriza por una variedad de paisajes: frondosos bosques, lagos de agua cristalina, majestuosas montañas y vastas llanuras.
Esta diversidad geográfica no solo ha dado forma al modo de vida mapuche, sino que también ha enriquecido su cultura. Los mapuches tienen una profunda conexión con la naturaleza, que respetan y protegen con dedicación. Las tierras mapuche son un ejemplo vivo de la riqueza ambiental y la biodiversidad de América del Sur.
Cultura y sociedad: una tradición de resiliencia e innovación
Los mapuches son conocidos por su rico patrimonio cultural, que incluye un idioma único, el mapudungun, prácticas artesanales tradicionales y ceremonias espirituales profundamente arraigadas. La sociedad mapuche valora la comunidad, la solidaridad y el respeto por los mayores. También han demostrado una increíble resiliencia frente a los desafíos históricos. A pesar de las presiones de las políticas de colonización y asimilación, han preservado su identidad y continúan reclamando sus derechos y autonomía.
Política: una lucha continua por los derechos y el reconocimiento
El pueblo mapuche es un brillante ejemplo de movilización política y defensa pacífica. Durante décadas, ha luchado por el reconocimiento de sus derechos territoriales, culturales y políticos. Sus esfuerzos han dado lugar a importantes avances, como el reconocimiento de su cultura y su idioma por parte de los estados chileno y argentino.
Los mapuches participan activamente en la política local y nacional, con representantes electos que defienden sus intereses dentro de las instituciones gubernamentales. También utilizan mecanismos internacionales, como las Naciones Unidas, para hacer oír su voz y promover sus derechos. El pueblo mapuche, por su rica cultura, su resiliencia geográfica y su movilización política, es un ejemplo inspirador de determinación y orgullo. Su historia y su lucha por la justicia y el reconocimiento son un poderoso testimonio de la importancia de preservar las culturas indígenas y respetar sus derechos.